Chubut: más de 60 efectivos, drones y perros rastrillan la zona en donde desapareció una pareja de jubilados
Pasada una semana de la desaparición de Pedro Alberto Kreder, de 79 años, y Juana Inés Morales, de 69, una pareja de jubilados de Comodoro Rivadavia, el gobierno del Chubut mantiene un amplio op...
Pasada una semana de la desaparición de Pedro Alberto Kreder, de 79 años, y Juana Inés Morales, de 69, una pareja de jubilados de Comodoro Rivadavia, el gobierno del Chubut mantiene un amplio operativo de búsqueda en la zona costera del Cañadón Visser, entre Rocas Coloradas y Camarones.
El vehículo en el que viajaban, una Toyota Hilux beige con cúpula, fue hallado días atrás encajado en el barro en un sector despoblado, con dinero y varios objetos de sus ocupantes, pero sin rastros de ellos. Desde entonces, el operativo se intensificó con patrullas terrestres, canes entrenados y apoyo aéreo con drones.
De acuerdo con la reconstrucción oficial, Kreder y Morales salieron de su domicilio en Comodoro Rivadavia el sábado 11 de octubre a las 9.30. Sus teléfonos celulares dejaron de emitir señal poco después de salir de la ciudad, y con el paso de las horas la preocupación comenzó a crecer entre familiares y amigos.
La esperanza se transformó en desconcierto cuando la camioneta en la que viajaban apareció abandonada y atascada en el barro seis días después, en medio de un paraje desolado, azotado por el viento y sin rastros de sus ocupantes.
Las cámaras de seguridad los captaron en la rotonda de las rutas 3 y 39, y luego circulando por la calle Punta Novales, rumbo a Caleta Córdova. Desde entonces no hubo más contacto.
Días después, personal policial encontró la camioneta abandonada a unos 70 kilómetros de la ciudad, en un paraje conocido como Rocas Coloradas. El vehículo estaba detenido en un camino de ripio, con una de sus ruedas hundidas en el barro y las puertas cerradas, sin signos de violencia. Dentro se hallaron documentos y objetos personales, pero ningún indicio del destino de la pareja. No estaban sus teléfonos celulares.
“Mi papá es alguien muy prudente, cuidadoso con su vida y con el vehículo. No habría arriesgado ni la suya ni la de Juana manejando por un lugar tan peligroso”, aseguró Gabriela Kreder, hija del hombre desaparecido.
Chubut: sigue la busqueda de los jubilados desaparecidosUn operativo a gran escalaEl Ministerio de Seguridad y Justicia de Chubut, a través de la policía provincial, organizó un despliegue de más de 60 efectivos distribuidos en tres grupos de búsqueda con canes especializados.
El rastrillaje terrestre cubrió cerca de 50 kilómetros, desde el punto donde apareció la camioneta hasta la Ruta Nacional 3. Además, se utilizaron drones, camionetas 4x4 y equipos técnicos de Defensa Civil Provincial, Bomberos Voluntarios y personal de la División Búsqueda de Personas.
Las tareas fueron supervisadas por el ministro de Seguridad y Justicia, Héctor Iturrioz; el jefe de Policía del Chubut, comisario general Andrés García, y autoridades locales de Defensa Civil. Participan también especialistas del Sifebu (Sistema Federal de Búsqueda de Personas Desaparecidas y Extraviadas), la Policía Federal Argentina y la Policía Científica de Esquel, con canes de búsqueda de personas vivas en grandes áreas.
La familia y el desconciertoSegún declaraciones de la hija de Juana Morales, la pareja mantenía una relación de reciente data y había decidido realizar “un viaje improvisado” hacia la zona costera.
“Mi mamá nunca se iba sin avisar, esto no es normal”, dijo la joven en declaraciones a la prensa local. Ninguno de los dos acostumbraba a alejarse de la ciudad y, según los familiares, no tenían planeado un recorrido extenso.
En la camioneta solo había elementos personales y algo de ropa ligera, sin equipaje que sugiriera un viaje prolongado.
Los investigadores analizan varias líneas. Una de ellas plantea que, al quedar el vehículo encajado en el barro, Kreder y Morales podrían haber intentado buscar ayuda caminando hacia la costa o hacia la ruta.
La zona es agreste, con escasa señal de celular y sin viviendas cercanas. Otra posibilidad, aún sin indicios firmes, es que hayan sufrido un accidente o desorientación en medio del terreno. Por ahora no se registraron señales de un hecho delictivo, aunque las autoridades mantienen abierta una amplia investigación. “Se trabaja sobre todos los escenarios posibles hasta que aparezcan pruebas concretas”, señalaron fuentes policiales consultadas.
Un paisaje inhóspito y un desafío logísticoRocas Coloradas y el Cañadón Visser conforman un área de meseta desértica, con cañadones profundos, playas rocosas y caminos de difícil acceso. Las condiciones meteorológicas de los últimos días –vientos fuertes y baja visibilidad– complicaron las tareas de búsqueda.
Los equipos de rescate realizan barridos coordinados con mapas satelitales, asistencia de drones y guías caninos que recorren los zanjones y quebradas donde podría haberse perdido algún rastro. “El terreno es extenso y muy irregular, cada metro requiere un esfuerzo físico enorme”, explicaron desde Defensa Civil.
La desaparición conmocionó a Comodoro Rivadavia y generó una movilización espontánea de vecinos y organizaciones locales. Familiares y amigos de la pareja pidieron colaboración a voluntarios con vehículos adecuados y drones para ampliar la búsqueda. El pedido de difusión se viralizó en redes sociales con la esperanza de sumar testimonios o registros visuales que ayuden a reconstruir el recorrido del vehículo en los últimos días antes del hallazgo.
Mientras las horas avanzan, el rastrillaje continúa sin resultados. Las autoridades provinciales anunciaron que el operativo se mantendrá activo con refuerzos durante toda la semana. Las familias de Kreder y Morales aguardan noticias con expectativa y temor, aferrada a la posibilidad de que aparezcan con vida.
“No vamos a dejar de buscarlos”, dijo un allegado. Por ahora, en el inhóspito paisaje costero del Chubut, lo único que permanece es el silencio.