Las desconocidas razones por las que las automotrices eligen a la Argentina para fabricar sus pickups
La Argentina se ganó la fama de ser la “tierra prometida” de las pickups. No se trata solo de una percepción, sino que ...
La Argentina se ganó la fama de ser la “tierra prometida” de las pickups. No se trata solo de una percepción, sino que el mismo país se consolidó como un verdadero polo productivo y referente en la región, al punto tal de que los modelos que se fabrican en suelo argentino se exportan a distintos mercados de América Latina y, en algunos casos, incluso por fuera del continente.
En este escenario se destacan nombres de peso como la Toyota Hilux, Ford Ranger, Fiat Titano, Volkswagen Amarok, Renault Alaskan y Nissan Frontier. Algunas de ellas están próximas a discontinuarse, pero el recambio ya está en marcha y varias automotrices anunciaron nuevas generaciones y proyectos que aseguran que el mapa de la industria nacional seguirá teniendo a las pickups como protagonistas.
La decisión de fabricar en la Argentina tiene un justificante estratégico en cada una de las terminales que se instalaron en el país. Ford, por ejemplo, le explicó a LA NACION que se trata de un plan “basado en varios factores estratégicos y de mercado”.
La automotriz produce en el país la Ranger desde 1996 y hace poco concretó una inversión de US$700 millones en su planta de Pacheco, provincia de Buenos Aires. “La transformamos en una instalación de manufactura 4.0 equipada con tecnología para la producción de la nueva generación de esta camioneta”.
“Nuestro país se ha consolidado como un centro de producción clave de pickups, siendo el cuarto productor mundial y el principal en Latinoamérica de pickups medianas“, agregaron. Esto, en parte, se explica porque es un país en donde hay proveedores especializados en este tipo de productos y por una mano de obra altamente capacitada.
A eso hay que sumarle la demanda y preferencias del cliente, donde “el país tiene una profunda cultura de pickups”; “la adaptabilidad del terreno, por la geografía variada con extensas zonas rurales”; la especialización industrial y de exportación y la situación impositiva, “ya que estos productos estuvieron exentos del impuesto interno y tributan el IVA reducido del 10,5% en vez del 21% que se aplican a autos y SUV”, como definieron desde Ford.
En una sintonía similar, Toyota Argentina dio sus primeros pasos en 1997 cuando inició la producción de la Hilux, una camioneta del segmento mediano que se fabrica en la planta de Zárate, provincia de Buenos Aires.
“En ese momento estaba naciendo el Mercosur y nuestro país reunía varias ventajas para ese proyecto: complementariedad con Brasil, un entramado sólido de autopartistas, una demanda interna potencial muy importante por el desarrollo del sector agropecuario, minero y petrolero y perspectivas claras de exportación en una región en crecimiento”, introdujo Ignacio Limpenny, director regional de Ventas y Marketing de Toyota Argentina.
“Actualmente, la Argentina está consolidada como productor de pickups donde el crecimiento del sector se sostiene tanto por el mercado interno como por las exportaciones. La estrategia de expandir la exportación hacia América Latina ha permitido que la industria crezca de la mano de la especialización en pickups, lo que posiciona a la Argentina por encima de otros países de la región y como cuarto fabricante mundial”, comentó Limpenny.
“A su vez, el país ofrece una base industrial sólida, con proveedores especializados, mano de obra calificada y acceso a puertos y rutas estratégicas que facilitan la logística de exportación. Estas características, combinadas con un mercado local y regional donde el cliente valora las pickups tanto para trabajo como para uso personal, consolidan al país como un polo estratégico de producción de vehículos utilitarios”, agregó.
Esta decisión de fabricarla en Zárate llevó a que en 2023 esta pickup haya alcanzado un acumulado de 2.000.000 de unidades producidas.
Conforme pasaron los años, más automotrices decidieron plantar bandera productiva de ese segmento en la Argentina. Tal es el caso del Grupo Stellantis, que viene de protagonizar una inversión de US$385 millones en la planta de Ferreyra, Córdoba, con el objetivo de producir una nueva familia de vehículos y un nuevo motor.
Con eso en mano, se presentó la Fiat Titano, pickup mediana que se incorpora a este competitivo segmento y se anunció la RAM Dakota, otra chata que se fabricará en tierras argentinas.
La nueva RAM empezará a venderse en el país a partir de fin de año para, en 2026, empezar a exportarse a Brasil y a otros mercados.
“Sin dudas la Argentina cuenta con ventajas únicas para producir pickups, ya que hay una alta demanda interna de estos vehículos que desafía a las automotrices a ser cada vez más competitivas. Esto combinado con la larga historia de producción automotriz a nivel nacional y los proveedores de gran calidad con los que contamos, son un incentivo perfecto, así como una base muy sólida para la producción de pickups”, comentaron desde el Grupo Stellantis.
En otro segmento, pero también en el mundo pickup, Renault se prepara para presentar novedades. Tras una inversión de US$350 millones, empezará a producir en la planta de Santa Isabel, en Córdoba, una chata compacta con un fuerte objetivo de exportación.
Del modelo todavía no se conocen demasiados detalles, pero se prevé que el “Proyecto Niágara” empiece a fabricarse a partir de la segunda mitad de 2026 tras haber reformado dos tercios de la fábrica cordobesa para ello.
La llegada de esta pickup marcará un recambio importante dentro de la estrategia de la marca, que este año deja de fabricar la Alaskan, su reconocida chata que compartía línea de montaje con la Nissan Frontier.
La vista en el futuro está claramente puesta en seguir fortaleciendo a la Argentina como productor de pickups. Al mismo tiempo que se espera que marcas hagan más anuncios, los ya vigentes generan movimiento en el mercado autopartista, local y de exportación.
A las novedades mencionadas se suma Volkswagen, que confirmó para 2027 la producción de una nueva Amarok que se producirá en el Centro Industrial Pacheco, en la provincia de Buenos Aires, producto de una inversión de US$580 millones y será un producto destinado únicamente para el mercado sudamericano.
Un producto que avanza en segmentos urbanosTodas las terminales automotrices comparten un motivo de peso para producir al menos una pickup en el país: la alta demanda interna. Y los números lo respaldan; si bien gran parte de lo producido se exporta, tres de estos modelos se encuentran entre los cinco más vendidos de todo el mercado.
La Toyota Hilux lidera el segmento con 22.077 unidades patentadas entre enero y agosto, seguida por la Ford Ranger con 18.468 registros, y la Volkswagen Amarok completa el podio con 18.388 ventas, según la Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina (Acara).
De hecho, según el último informe de Acara, todas las pickups representan un 20% del mercado total interno.
Estas cifras derriban el viejo mito de que las pickups son vehículos pensados únicamente para el trabajo rural o para uso industrial. Esa etapa ya quedó atrás, porque hoy estos modelos evolucionaron hasta convertirse también en una alternativa urbana, gracias a las mejoras en confort, tecnología y seguridad que fueron incorporando en los últimos años.
En definitiva, si la demanda ya era alta —tal como reconocen las propias automotrices—, con el agregado de un perfil urbano las pickups lograron consolidarse como uno de los segmentos más atractivos y elegidos del mercado.
“El fenómeno de las pickups en la Argentina va mucho más allá del campo. Sin dudas, sectores como la agricultura, la minería o el petróleo la eligen como herramienta de trabajo por su robustez y confiabilidad. Pero, al mismo tiempo, la Hilux se consolidó también en entornos urbanos gracias a la diversidad de versiones que ofrecemos, que permiten combinar capacidad de trabajo con confort y tecnología para un uso más familiar o recreativo”, detalló el ejecutivo de Toyota Argentina.
De manera similar, desde Ford Argentina comentaron que “definitivamente ha habido un cambio significativo en el consumo y uso de las camionetas, que se han convertido en vehículos cada vez más versátiles”. Por ejemplo, comentan que desde el lanzamiento de la nueva generación de Ranger han visto crecer de manera significativa el mix de ventas de versiones más equipadas —como la Limited V6 y la Limited Biturbo— que son más buscadas por los clientes que usan la camioneta como vehículo familiar, o mismo que combinan trabajo y esparcimiento.
Para reafirmar este concepto, desde el Grupo Stellantis comentaron que son vehículos sumamente versátiles. “Definitivamente las pickups son cada vez más elegidas por los clientes para su vida familiar y urbana por su seguridad y equipamiento”, dijeron.
Por último y de cara a futuro, desde el grupo comentaron que “en un contexto de tendencia hacia la estabilización económica del país creemos que los recientes lanzamientos tendrán un impacto positivo como vehículos utilitarios de carga en industrias en auge, tanto en el sector agropecuario como en el sector de energía”.