“Tango Vitrola” desembarca en el Guggenheim de Nueva York
Con una conferencia sobre los procesos de creación y montaje, y la presentación de una de sus primeras obras, Tango vitrola, el coreógrafo argentino Alejandro Cervera estará haciendo pie en Nue...
Con una conferencia sobre los procesos de creación y montaje, y la presentación de una de sus primeras obras, Tango vitrola, el coreógrafo argentino Alejandro Cervera estará haciendo pie en Nueva York el próximo 3 de marzo, a las 19, convocado por el Museo Guggenheim.
Tango Vitrola fue creada para el Ballet Contemporáneo del Teatro San Martín en 1986. La obra tuvo un recorrido muy exitoso y fue luego montada en el Ballet Estable del Teatro Colón, en el Taller Coreográfico de la Universidad de México, en varias compañías de la Argentina y en otras tres de los Estados Unidos: Ohio, Chicago y Nueva York, esta último, hace una década. Será justamente ese mismo Ballet Hispánico el que lo vuelva a interpretar esta vez, en la sala del Upper East Side.
¿Cómo, cuatro décadas después, una obra puede seguir oficiando de fiel carta de presentación para un creador que a partir de ese primer mojón a recorrido una larga trayectoria? Cervera responde: “No deja de ser emocionante que algo que uno pensó y armó de la nada tenga vigencia y reaparezca cuarenta años después muy lejos de casa y esta vez en una ciudad que amo. Creado desde un boceto coreográfico que monté en el American Dance Festival en 1985, donde fui becario, Tango Vitrola tomó forma definitiva al año siguiente para el Ballet Contemporáneo del Teatro San Martín. Tuvo y tiene muchas vidas, porque cada obra vive en el cuerpo de cada bailarín que la baila. Y por supuesto pensar que las imágenes, las músicas, las fotos y los vagos recuerdos de mi infancia en bailes familiares que me inspiraron aparezcan ahora encarnados en otros cuerpos que hablan otros idiomas y viven tan lejos, no deja de ser sorprendente -dice el coreógrafo, con la profundidad que lo caracteriza-. Así entonces el misterio de la danza y el misterio del tiempo, que son uno, toman forma en una nueva ceremonia, un nuevo festejo. Festejo que hace lo que hace siempre: unir almas y sentidos".